Gales: Un investigador que se retiró a tiempo
Un investigador que se retiró a tiempo: Randall Jones Pugh
Por Scott Corrales
El amigo Andy Stephenson compartió con nosotros unos recortes de prensa del periódico Western Mail (País de Gales, Reino Unido) con fecha del 28 de noviembre de 1980 que estaban encartados en su ejemplar de uno de los libros más importantes sobre el fenómeno OVNI en las islas Británicas: The Dyfed Enigma (Londres: Parker and Faber)
La obra recoge la oleada ovni y de mutilaciones de ganado en el País de Gales durante los ’70 – casos que incluirían encuentros con humanoides, avistamientos OVNI, y la enigmática e inexplicada teleportación de vacunos (evento que se repetiría a miles de kilómetros de distancia durante la oleada argentina del 2002-03).
The Dyfed Enigma fue una colaboración entre F.W. Holiday (autor de The Dragon & The Disk y The Goblin Universe) y R.J Pugh: el primero de ellos fallecería tras un encuentro con un “hombre de negro” relacionado con sus pesquisas en torno al supuesto monstruo de Loch Ness, pero el segundo comunicaría a la prensa el motivo de su distanciamiento permanente de la fenomenología ovni.
“El hombre que ocupó el centro de la psicosis que sacudió el oeste de Gales ha renunciado a la labor de investigar los avistamientos porque sus descubrimientos le han atemorizado”, comienza el artículo de Western Mail, informado a sus lectores que Pugh, reconocido veterinario de la comunidad de Roch, cerca de Havertfordwest, se daba de baja tras descubrir que “el fenómeno tiene que ver con el ocultismo” y que hay “fuerza malévolas al acecho”.
Sigue: “[Pugh] advirtió a otros que tal vez estén interesados en internarse en el asunto: “No lo hagan, o se arrepentirán”.
Pugh renunció en 1980 a su cargo de coordinador de la organización BUFORA para el sur de Gales luego que sus investigaciones y estudios le dejaran “espiritualmente estremecido”.
“Desde el principio, echó por tierra la teoría de que los ovnis eran producto de visitas extraterrestres de otros planetas, pensando que todo formaba parte de otro plano de existencia en la tierra, y los avistamientos se producían cuando estos niveles de existencia se solapaban sobre el nuestro. ‘Profundicé excesivamente en el tema y descubrí experiencias que son demasiado atemorizantes como para conversar sobre ellas”.
A pesar de la insistencia del reportero, el investigador se negó a soltar trapo, limitándose a contestar: “Algunos de [estos casos] son precisamente lo que nos ha estado predicando la Biblia por los últimos dos mil años.” Pugh comentó que otros investigadores se habían apartado del tema tras haber hecho descubrimientos parecidos que sacudieron sus creencias. Entre ellos figuraba un exdirector superior de BUFORA.
“Eran reflejos de nuestro propio mundo”, afirmó Pugh al Western Mail, “y cualquiera que se precie de su bienestar espiritual y físico debe abstenerse de participar. Los efectos psicosomáticos pueden ser tremendos”.
La nota de prensa pasa a comentar los eventos que dieron lugar al libro The Dyfed Enigma.
La situación tuvo su comienzo cuando los estudiantes de Broad Haven afirmaron haber presenciado el aterrizaje de una “nave espacial” en un campo cercano a su colegio. Esto desató la marejada de casos que se dieron a conocer en años posteriores. Los primeros casos tuvieron su comienzo en 1974, pero el grueso de la acción se desarrolló en 1977 durante la "oleada del oeste de Gales". Uno de los presentadores de la BBC en la ciudad de Cardiff -- Vincent Kane -- comentó sobre estos incidenes que "sea lo que sean, platillos voladores, OVNIS, han sido vistos en todas partes de Gales. Un avistamiento ocurrió recientemente en Prestatyn, otro en la costa oeste, y otro más en Monmouthshire".
Pugh investigó todos los casos en persona, realizando a la vez una esmerada investigación de gabinete. “Descubrí la presencia de influencias negativas y peligrosas que eran perjudiciales para toda la humanidad”.
Las declaraciones hechas por el doctor Pugh a la prensa fueron tajantes. “Estamos lidiando con factores que son todo lo opuesto a lo que predica la iglesia. Sencillamente me ha ahuyentado. La gente con principios cristianos puede convertirse en el blanco para semejantes fuerzas malignas".
La nota concluye: “Otros que experimentaron las mismas secuelas aterradoras tampoco quieren hablar de sus experiencias, y él ahora entiende por qué. Se trataba del ocultismo, parecido a la caja de Pandora, y ya había visto bastante”.
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